De 0 a 1 año

Nuestros bebés en las mejores manos

bebé jugando con una bola grande
Motivo decorativo rojo

¿Sabías que, en los hitos motores que se producen durante el primer año, se inicia la coordinación entre los ojos y las manos que necesitarán para aprender en el futuro la lectoescritura?

El primer año de vida es uno de los más determinantes en el desarrollo del niño, por eso no solo se pueden cubrir las necesidades físicas, asistenciales, de los más pequeños. También requiere de la Escuela y sus profesionales, conocer en profundidad que sucede en cada momento y como estimular, de forma natural, sin prisas y con mimo, su desarrollo físico, emocional y cognitivo.

Y esta es la gran ventaja de escolarizar de forma temprana a los niños: saber que están con los mejores profesionales y en el mejor entorno, para aprovechar y disfrutar cada momento, evitando futuras dificultades y con las mayores garantías.

¿Qué hacemos en la escuela en esta etapa?

Motivo decorativo

Nuestros docentes potencian, con amor y formación, las capacidades innatas que tienen los más pequeños con los recursos, medios y estímulos necesarios para hacerlo, respetando su carácter y sus necesidades, y sin perder de vista que cada uno de nuestros bebés son únicos, irrepetibles.

En nuestra Escuela somos conscientes de que esta etapa requiere de los mejores profesionales, para acompañar los rápidos cambios que se producen y que somos el complemento perfecto de las familias para los más pequeños. Para poder disfrutar de dos espacios complementarios en los que sentirse querido: su casa y su escuela.